El número de recién nacidos en Japón cayó a un mínimo histórico de 918.397 en 2018, según información recogida por el gobierno japonés, informó Kyodo.
Por tercer año consecutivo, el número se mantuvo por debajo del millón.
Mientras que la cantidad de nacimientos se redujo en 27.668 con respecto al año previo, la de muertes subió 22.085 a 1.362.482.
La disminución de la población registrada el año pasado, 444.085, es la más grande desde 1899, año desde el que se recopilan cifras al respecto.
Okinawa fue la única de las 47 prefecturas de Japón donde hubo más nacimientos que muertes.
La tasa de fertilidad de Japón, el número promedio de hijos que una mujer tendrá en su vida, sufrió un descenso interanual de 0,01 puntos a 1,42.
En 1947, la tasa ascendió a 4,54. En 1975, cayó por debajo de 2. En 2005, descendió a un mínimo histórico de 1,26.
El gobierno de Japón quiere aumentar la tasa a 1,8 para 2026.
Un funcionario del Ministerio de Salud declaró a Kyodo que implementaran políticas para ayudar a las mujeres a ser madres y criar a sus hijos.
Las mujeres japonesas dan a luz a su primer hijo en promedio a los 30,7 años.
De acuerdo con un sondeo realizado en mayo por la organización 1more Baby Oendan, el 73,5 % de los aproximadamente 3.000 encuestados dijo que es difícil para ellos tener un segundo hijo. El principal obstáculo es económico.
Por otro lado, el número de matrimonios cayó a 586.438, la cifra más baja de la posguerra y 20.428 menos que el año previo.
En promedio, los hombres se casan a los 31,1 años y las mujeres a los 29,4 años.
Por último, el cáncer fue la causa más alta de muerte (27,4 % del total de fallecimientos) en Japón, seguido por enfermedad cardíaca (15,3 %) y causas naturales (8 %). 20.032 personas se suicidaron (1,5 % del total), 433 menos que el año previo. (International Press)
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