«Asaichi Dori», la legendaria calle del mercado de Wajima, en Ishikawa, de más de 1000 años quedó reducida a cenizas tras el terremoto de ayer en la península de Noto.
Esta histórica zona comercial ubicada en el barrio de Kawai-machi ardió durante horas iluminando la noche y la madrugada del día más triste para Wajima mientras los bomberos luchaban por contener el incendio.
Aquí los vendedores locales ofrecían pescado y artesanías de laca de Wajima, convirtiéndose en el corazón turístico de la ciudad. Pero la mañana de hoy no quedaba rastro de su antiguo esplendor salvo columnas de humo blanco y algunas llamas.
En las calles, se observaban a personas que regresaban a sus hogares para limpiar y evaluar los daños. La televisión mostró a un hombre que, habiendo huido con lo puesto, se detuvo perplejo mirando su casa en ruinas y comentó en medio de un total desconcierto: «No tengo idea de qué hacer ahora. No puedo contactar a mi familia, ¿qué haré?».
Las labores de extinción de incendios en Wajima siguen en marcha y aún no se conoce la magnitud total del daño. Varias pobladores, algunos de ellos ancianos, aún esperan ser rescatados entre los escombros de sus hogares derrumbados.
Esta mañana se pudo escuchar más sirenas de las ambulancias, indicando que las operaciones de rescate estaban en marcha tras haber superado las carreteras obstruidas por deslizamientos y caídas de inmuebles. (RI/International Press)
