Los chikan son una plaga aparentemente inextinguible en Japón. Una de sus numerosas víctimas fue la tuitera japonesa @7bo8rtWwXXl8GdE. Durante su adolescencia, se propasaron múltiples veces con ella en los trenes.
Las cosas cambiaron significativamente cuando terminó koko. Tan pronto como dejó de ser una estudiante, casi de manera mágica dejó de toparse con chikan. ¿La razón? Ya no llevaba uniforme escolar.
Aunque fue una buena noticia que ya no la molestaran, para ella fue desolador darse cuenta de cómo un uniforme escolar, que significa que quien lo usa es una menor de edad, es un imán para los pervertidos.
“Es una locura cómo en este país un uniforme se convierte en un ícono que hace a quien la usa un objetivo para este tipo de comportamiento», escribió.
La experiencia de la tuitera japonesa, relatada por el sitio SoraNews24, originó reacciones de mujeres que han atravesado por situaciones similares:
- «Lo mismo pasó conmigo. A cada rato me encontraba con chikan cuando estaba en koko, pero eso paró casi por completo una vez que entré en la universidad. Hay tipos raros que están realmente interesados en las estudiantes de koko y tienen complejos de Lolita».
- “Cuando entré a la universidad y dejé de usar uniforme (escolar), dejé de encontrarme con chikan, hasta que empecé a buscar trabajo y usaba un traje sastre para las entrevistas. Entonces empecé a ser objetivo de los chikan de nuevo. Los chikan piensan que una mujer con uniforme no querrá armar una escena desafiándolos».
- «Me enferma que tantos hombres tengan sentimientos tan lascivos por las menores de edad».
- «Eso es porque los personajes de manga pornográfico y los videos para adultos son chicas de koko. ¡Deberían prohibirlos!”.
- «Quiero que mujeres policías se disfracen de colegialas para que puedan atrapar a todos los chikan».
- «Pienso en serio que deberían comenzar a hacer que los uniformes escolares de las chicas se vean como trajes, con pantalones largos».
(International Press)
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