La policía sospechaba que podía ser el violador y ladrón que se dio a la fuga hace casi tres semanas de una estación policial en la ciudad de Osaka y le pidió que se detuviera.
El sospechoso, sin embargo, era un adolescente de 17 años que se movilizaba en una motocicleta, no el fugitivo Junya Hida, el hombre de 30 años cuyo rostro se ha vuelto omnipresente en Japón. Miles de agentes han sido movilizados para capturarlo.
El menor ignoró a la policía y esta comenzó a perseguirlo, revela la agencia Kyodo.
Durante su huida, el adolescente se pasó una luz roja, se estrelló contra un poste y murió. El menor, un estudiante de koko, no tenía licencia de conducir.
El incidente ocurrió el jueves alrededor de las 9:20 p. m.
La policía había sido alertada sobre la presencia de un hombre parecido a Hida que se desplazaba en una motocicleta. Confundieron al delincuente con un menor de edad.
Poco después de la huida de Hida, una minimoto negra fue robada cerca del hogar de los padres del delincuente y la policía recibió denuncias de cuatro mujeres a quienes un hombre en un vehículo como el descrito robó sus bolsos en los tres días posteriores. El autor de los delitos, según la policía, es Hida. (International Press)
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