Vahid Halilhodzic clasificó a la selección de Japón al Mundial de Rusia, pero a poco más de dos meses de su inauguración, fue despedido de manera abrupta.
El técnico bosnio retornó a Japón en busca de explicaciones. Quiere saber por qué lo echaron. Su deseo es “descubrir la verdad”. En declaraciones recogidas por Asahi Shimbun en el Aeropuerto de Haneda, dijo que recibió un trato irrespetuoso y que se siente como si lo hubieran «tirado al cubo de la basura».
Halilhodzic estaba dolido y por momentos parecía a punto de quebrarse. Quien no pudo contener las lágrimas fue su intérprete.
«Debo pelear con quienes hieren mi dignidad», dijo.
«Es siempre un placer venir a Japón, pero esta es una situación extraordinaria», dijo el veterano técnico, quien aseguró que el momento que está viviendo es el más difícil de su dilatada vida futbolística de 45 años.
«Japón es un país maravilloso, y la sociedad japonesa tiene una cultura de respeto mutuo», agregó. Respeto es lo que, según él, faltó por parte de las autoridades del fútbol japonés.
La Asociación de Fútbol de Japón despidió al bosnio después de dos malas actuaciones en partidos amistosos con Malí (1-1) y Ucrania (1-2). Al parecer, su relación con los jugadores no era buena. El presidente de la asociación declaró que “la comunicación y la confianza con los jugadores se habían debilitado”.
El bosnio fue sustituido por Akira Nishino. Japón deberá enfrentar a Colombia, Polonia y Senegal en el Mundial. (International Press)
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