Un trágico incidente en un hogar de ancianos de la prefectura de Saitama, en el que han muerto dos residentes, ha dado un giro inquietante: el exempleado arrestado confesó haber accedido al centro utilizando el código PIN del bloqueo electrónico.
Toya Kimura, de 22 años, fue formalmente remitido a la fiscalía en la mañana de ayer. Se le imputa el asesinato de Toshiko Kobayashi, de 89 años, a quien atacó con un arma blanca en la madrugada de ese mismo día, en la residencia de ancianos con servicios de cuidados ubicada en Tsurugashima. Se investiga los detalles del otro caso mortal.
Nuevos detalles de la investigación policial revelan que Kimura admitió ante las autoridades haber «desbloqueado el cerrojo electrónico con el número PIN e irrumpido en las instalaciones». Esta confesión sugiere que el sospechoso pudo haber conservado el código de acceso del centro donde trabajó, lo que facilitó su ingreso de manera encubierta y sin forzar la seguridad.
Durante los interrogatorios preliminares, el sospechoso ya había reconocido el crimen contra la Kobayashi, declarando: «Es cierto que la apuñalé con un cuchillo y la maté».
Además, las cámaras de seguridad en las inmediaciones del lugar captaron a una persona, presuntamente Kimura, acercándose al hogar de ancianos en bicicleta poco antes de los hechos, reforzando la evidencia de su premeditación. (RI/AG/IP/)
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