El presidente ruso, Vladímir Putin, se reunió en Moscú con Akie Abe, viuda del ex primer ministro japonés Shinzo Abe, en un encuentro cargado de emotividad y recuerdos del legado del difunto líder, informó el Kremlin. La cita, a la que también asistió el asistente presidencial Yuri Ushakov, hoy, casi dos años después del trágico asesinato de Shinzo Abe el 8 de julio de 2022.
Putin dio la bienvenida a Akie Abe, recordándole sus visitas a Rusia junto a su esposo y un encuentro previo en 2019. El mandatario ruso destacó la inmensa contribución de Shinzo Abe al desarrollo de las relaciones ruso-japonesas, enfatizando la excelente relación personal que ambos forjaron. Putin rememoró sus propias visitas a Japón invitado por Abe, y subrayó el sincero esfuerzo del ex primer ministro japonés por la plena recuperación de la cooperación bilateral.
El presidente ruso resaltó que Shinzo Abe continuó una tradición familiar, ya que su padre, Shintaro Abe, también buscó mejorar los lazos con Rusia como ministro de Asuntos Exteriores en la década de 1980. «Estamos muy agradecidos por su postura, siempre hemos respetado su trabajo en esta dirección y recordamos su contribución al desarrollo de la cooperación ruso-japonesa», afirmó Putin.
Este reconocimiento conmovió a Akie hasta las lágrimas, en un momento cargado de simbolismo.
AKIE ABE: NOSTALGIA Y DESEO DE INTERCAMBIO CULTURAL
Por su parte, Akie Abe expresó su profunda gratitud a Putin por haberle dedicado tiempo en su apretada agenda. Compartió que sus viajes a Rusia con su difunto esposo le trajeron fuertes sentimientos de nostalgia al regresar.
Akie recordó las 27 reuniones que Putin y su esposo tuvieron, un número que, según ella, «demuestra la contribución que intentó hacer a las relaciones bilaterales». Hizo especial hincapié en la visita de Putin a la prefectura de Yamaguchi, la tierra natal de Shinzo Abe, un hecho inusual para un líder extranjero y que, para la señora Abe, «demuestra su actitud particularmente sincera hacia su país». Los habitantes de Yamaguchi, dijo, «aún recuerdan con orgullo la visita de Putin y el haber compartido el sake local».
El principal objetivo de su conversación, afirmó Akie Abe, era expresar su sincera gratitud a Putin por el activo diálogo y el desarrollo de las relaciones entre ambos países con su esposo. Reveló que Shinzo Abe, incluso después del inicio del conflicto en Ucrania, deseaba reunirse con Putin, pero lamentablemente su vida se truncó. «Él siempre, como testamento, decía que era necesario continuar este proceso que él se esforzaba por expandir», manifestó.
Aunque afirmó no ser política y no querer abordar cuestiones políticas, Akie manifestó que «Rusia es un vecino muy importante para Japón». Expresó su deseo de que, incluso en este período difícil, los intercambios culturales y los contactos entre personas sigan desarrollándose entre ambas naciones.
El presidente ruso destacó que él y Abe trabajaron intensamente, y que por iniciativa de Abe se creó un plan de interacción en diversas áreas: economía, industria, salud y cultura. Putin recordó que el «sueño» de Shinzo Abe, al que se esforzó sinceramente, era la conclusión de un tratado de paz entre ambos países, y que habían «avanzado seriamente en este camino». Sin embargo, reconoció que «ahora la situación es diferente, y no hablaremos de este componente del día de hoy».
Putin reiteró su mensaje a Akie Abe: «Usted siempre es una invitada bienvenida en nuestro país, en Rusia. Siempre estamos encantados de verla». (RI/International Press)
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