La Policía Metropolitana de Tokio ha iniciado una investigación por acceso ilegal a cuentas de inversión tras detectar que varios ciberataques a plataformas bursátiles japonesas habrían sido lanzados desde China. El caso involucra movimientos no autorizados por un valor que supera los 300 billones de yenes (2 billones millones de dólares).
Según fuentes policiales citadas hoy por el Nikkei, al menos 17 compañías de valores han sido afectadas, y se presume que los delincuentes utilizaron credenciales robadas para acceder a las cuentas de clientes desde el extranjero, ejecutando operaciones bursátiles de forma remota sin el consentimiento de los usuarios.
La sospecha principal es que los datos de autenticación fueron previamente filtrados o interceptados, y que la red de ataque podría estar conectada con grupos organizados dedicados al cibercrimen internacional.
La policía japonesa, en cumplimiento de la ley contra accesos no autorizados, ha comenzado a analizar los rastros de conexión digital para intentar identificar a los responsables y confirmar si se trata de una red operando desde territorio chino. (RI/AG/IP/)
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