Cada año, a partir de noviembre, Japón enfrenta un aumento en los accidentes relacionados con el uso de estufas de kerosene y calentadores eléctricos. Ante esta situación, el Instituto Nacional de Tecnología y Evaluación de Productos (NITE, por sus siglas en inglés), con sede en Tokio, ha lanzado una campaña para prevenir estos accidentes y ha difundido un conjunto de recomendaciones para reducir el riesgo de incidentes, especialmente dirigidas a personas mayores.
En los últimos cinco años desde 2019, Japón ha registrado 582 incidentes, como incendios, relacionados con calentadores. Más del 80% de estos accidentes se debieron al uso de estufas y calefactores eléctricos o de kerosene.
Los informes de NITE indican que 269 casos fueron incidentes ocurridos con estufas a kerosene y 49% de estos accidentes se debieron a errores de uso y negligencia, lo que sugiere la importancia de seguir las instrucciones de seguridad de estos dispositivos.
Las personas mayores de 70 años representan el grupo más afectado, con un total de 131 accidentes hasta 2022, de los cuales 31 fueron mortales. Estos casos suelen ser consecuencia de factores como el deterioro en las capacidades físicas o en la percepción, lo que puede llevar a errores fatales, como un cierre deficiente de los tanques de combustible o la confusión entre queroseno y gasolina.
Cinco recomendaciones clave para el uso seguro de las estufas de kerosene:
1- Limpieza de polvo acumulado: Es fundamental remover el polvo que pueda haberse acumulado sobre o alrededor de la estufa, ya que puede provocar incendios si entra en contacto con el calor.
2- Verificación del sistema de apagado automático en caso de terremotos: Es importante asegurarse de que el mecanismo de apagado automático, diseñado para casos de sismo, esté funcionando correctamente. En el caso de las estufas tradicionales, también se debe confirmar que la cámara de combustión esté bien colocada.
3- Uso de combustible adecuado: NITE aconseja usar solo queroseno nuevo y evitar emplear gasolina u otros combustibles, ya que una confusión puede resultar en incendios graves.
4- Cierre adecuado de los tanques de queroseno: Después de rellenar el tanque, es vital comprobar que el cierre esté completamente seguro para evitar fugas, especialmente en el momento de encender la estufa.
5- Mantener una distancia segura de materiales inflamables: La estufa debe colocarse a una distancia prudente de paredes, muebles y cualquier otro material combustible para reducir el riesgo de incendio.
ATENCIÓN A LAS PERSONAS MAYORES
NITE subraya la importancia de la participación de los familiares y cuidadores en la supervisión de las personas mayores que utilicen este tipo de dispositivos, ya que estas personas suelen ser las más afectadas por accidentes.
Se recomienda verificar que estén siguiendo las instrucciones de seguridad, prestando especial atención a la manipulación del combustible y al cierre adecuado de los tanques.
Con esta campaña de seguridad, Japón busca reducir los accidentes en los hogares durante los meses de invierno, especialmente entre su población envejecida. Las autoridades destacan que seguir las recomendaciones básicas puede prevenir incidentes graves y proteger vidas. (RI/International Press)
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