El yen japonés ha experimentado un notable fortalecimiento en las últimas semanas, lo que ha llevado a los estrategas de divisas a revisar sus previsiones para el final del año. Se espera que la moneda cierre 2024 en un rango medio de 140 yenes por dólar, más fuerte de lo que muchos habían pronosticado anteriormente, dijo el Nikkei.
En el último mes, el yen ha ganado un 10% frente al dólar, situándose en torno a 147,5 en las negociaciones de hoy la mañana y 147,13 a las 16:45 horas. Esto representa un cambio significativo respecto al mes pasado, cuando un dólar costaba 161 yenes.
En respuesta a esta tendencia, HSBC, la multinacional británica de banca y servicios financieros, ha revisado su pronóstico para fin de año, situando el yen en 148 yenes por dólar, frente a la previsión anterior de 152 yenes.
Los expertos en divisas de HSBC dijeron que, aunque parece haber una cierta subvaloración en el tipo de cambio del yen respecto al dólar, también reconocen cambios genuinos como una serie de débiles datos económicos de Estados Unidos y la volatilidad en los mercados de valores globales.
¿¥130, EL TIPO DE CAMBIO 2025?
UBS, otra entidad de servicios financieros, también ha actualizado su perspectiva, prediciendo que el yen cerrará el año en 145 yenes por dólar, más fuerte que los 160 yenes previstos anteriormente.
Además, para el próximo año, UBS anticipa un tipo de cambio de 130 yenes por dólar, en lugar de los 140 yenes que esperaba previamente. Estos cambios en las previsiones se deben a la postura agresiva del Banco de Japón y la perspectiva de recortes en las tasas de interés de Estados Unidos.
Masafumi Yamamoto, estratega jefe de divisas en Mizuho Securities, señaló la posibilidad de que el yen se deprecie a alrededor de 150 yenes en septiembre antes de fortalecerse a 145 yenes. Según declaró al Nikkei, «la preocupación del mercado está yendo demasiado lejos».
LA LÍNEA DE LOS ¥140
Por su parte, Yukio Ishizuki, estratega senior de divisas en Daiwa Securities, espera que el yen experimente volatilidad en las próximas semanas, pudiendo oscilar entre un valor más fuerte de 140 yenes y un valor más débil de 150 yenes, antes de estabilizarse en los 140 yenes hacia finales de año.
El fortalecimiento del yen se debe a desarrollos tanto en Japón como en Estados Unidos. En Japón, el gobierno ha comenzado este año a intervenir para impulsar la débil moneda, y el Banco de Japón sorprendió a los mercados el mes pasado al adoptar una postura monetaria más agresiva.
Finalmente, la pérdida de debilidad del yen ha dejado a los especuladores en una situación complicada, forzándolos a cerrar apuestas que predecían una caída de la moneda y a reducir la práctica popular del carry trade, que consiste en pedir prestado en yenes para invertir en activos con mayores rendimientos en el extranjero. Estas reacciones están empujando el yen a niveles más altos. (RI/NI/IP/)
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