La primera dama de Corea del Sur, Kim Geon-hee, acompañó al presidente Yoon Suk-yeol en su visita a los Estados Unidos y se reunió con desertores norcoreanos en la Fundación Nacional para la Democracia (NED) el 11 de julio. Durante el encuentro, Kim escuchó testimonios e intercambió opiniones sobre la situación de los derechos humanos en Corea del Norte.
La NED, establecida en 1983 por el Congreso de EEUU, es una organización bipartidista sin fines de lucro que ha apoyado consistentemente a grupos de derechos humanos en Corea del Norte desde la década de 1990.
Kim señaló que algunos informes reflejan la brutal realidad norcoreana. «Recientemente, se informó que Corea del Norte ejecutó públicamente a más de 30 estudiantes de secundaria por ver dramas surcoreanos, lo que muestra la cruel realidad del régimen», afirmó la Primera Dama.
La Primera Dama reafirmó el compromiso del gobierno surcoreano de mejorar los derechos humanos en Corea del Norte, asegurando que nunca darán la espalda a los residentes norcoreanos que sufren. «El valor de sus acciones cambiará a Corea del Norte, y tanto yo como el gobierno surcoreano estaremos con ustedes hasta el final», declaró Kim.
En el marco de su visita, Kim se reunió nuevamente con la madre de Otto Warmbier, un estadounidense que fue encarcelado en Corea del Norte y liberado en estado de coma en 2017, falleciendo poco después. La madre de Warmbier agradeció a Kim por recordar siempre a Otto y le obsequió un collar en señal de gratitud. (RI/AG/)