Un inesperado giro de los acontecimientos en un ejercicio de entrenamiento militar en Corea del Norte dejó un saldo trágico de muerte y lesiones entre los soldados, un hecho presenciado por la hija de Kim Jong-un. Se cree que han muerto más de 10 personas en el accidente.
Según informes de SBS News de Corea del Sur, durante una inspección encabezada por Kim Jong-un, líder supremo de Corea del Norte, en una unidad de paracaidistas, se produjo un accidente durante un ejercicio de salto con resultados devastadores.
El evento, que tuvo lugar el 5 de abril, presenció una escena impactante mientras varios soldados saltaban desde una aeronave de transporte. Fuertes vientos azotaron el área, causando que los paracaídas de los soldados fueran arrastrados horizontalmente en lugar de desplegarse correctamente.
Las imágenes transmitidas por la televisión central de Corea del Norte mostraron paracaídas enredados y soldados luchando por mantener el control tras el salto.
El periodista especializado en temas norcoreanos de SBS, An Jong-sik, explicó que la situación se tornó aún más sombría cuando un soldado pareció quedar atrapado en la parte delantera de la aeronave durante el descenso. Otro quedó suspendido del ala derecha del avión.6
Este trágico incidente no solo ha revelado la negligencia en los procedimientos de seguridad, sino que también ha arrojado luz sobre la presencia de la hija de Kim Jong-un, conocida como «Jue», durante la inspección del entrenamiento. Su presencia ha generado especulaciones sobre su posible papel futuro en la política de Corea del Norte, ya que se ha planteado la posibilidad de que se convierta en sucesora de su padre.
Además, este evento ha avivado el debate sobre la mentalidad de desprecio por la vida humana que parece prevalecer en el régimen norcoreano, donde los líderes muestran una preocupante indiferencia hacia la seguridad y el bienestar de sus ciudadanos.
Mientras tanto, expertos militares han señalado las preocupaciones sobre las condiciones climáticas durante el ejercicio. Según el periódico Chosun Ilbo de Corea del Sur, el ejército surcoreano suele cancelar los entrenamientos de paracaidismo si los vientos superan los 17 nudos (aproximadamente 8.7 metros por segundo) por motivos de seguridad. (RI/AG/IP/)
