Daihatsu Motor reanudó hoy lunes parte de su producción nacional, casi un mes y medio después de suspender toda su producción en Japón debido al fraude en las pruebas de seguridad de sus coches nuevos.
Daihatsu, la filial de mini coches de Toyota Motor, reinició la producción de dos modelos en su fábrica en la prefectura de Kioto después de obtener hace unos días la autorización del Ministerio de Transporte.
Los dos modelos son la furgoneta comercial Probox, que Daihatsu produce para Toyota, y la Familia Van para Mazda.
En diciembre, Daihatsu admitió haber falsificado datos en las pruebas de seguridad de la mayoría de sus modelos, lo que provocó la interrupción de todos los envíos nacionales y extranjeros, así como de la producción en sus plantas de montaje nacionales.
Daihatsu también reanudó los envíos coches en Malasia e Indonesia después de obtener la aprobación de las autoridades locales. (RI/AG/)