La policía de Tailandia arrestó a dos ciudadanos japoneses por realizar estafas teléfonicas desde una casa en Bangkok.
Sus víctimas eran personas en Japón, informa Kyodo.
Con los dos japoneses, de 41 y 49 años, fueron arrestados dos taiwaneses por la misma razón.
Los japoneses entraron a Tailandia en octubre y trabajaban para los taiwaneses, los cerebros de la banda.
En la vivienda desde la que operaban se encontraron teléfonos móviles, computadoras y manuales que “enseñan” cómo estafar.
Los delincuentes se hacían pasar por trabajadores de banco o policías para llamar a sus víctimas en Japón, a quienes engañaban para que transfirieran fondos a cuentas bancarias que ellos les indicaban.
Uno de los métodos empleados por los hombres consistía en hacer creer a las personas en Japón que tenían deudas sin pagar.
La policía tailandesa sospecha que hay más involucrados en las estafas.
El mismo día en que se hizo pública la noticia, 25 japoneses fueron deportados desde Camboya por la misma razón: montar una red de estafas telefónicas que tenían como blanco a ciudadanos en Japón. (International Press)