El Aeropuerto Internacional de Narita tiene alrededor de 36.300 trabajadores, 7.000 menos que en 2017.
La caída de 16 % de su fuerza laboral es un dolor de cabeza para el operador del aeropuerto, según la NHK.
El problema se hace más patente considerando que la afluencia de pasajeros está creciendo a pasos agigantados desde que Japón abrió sus fronteras tras más de dos años de cierre por la pandemia.
A ello hay que sumarle que la tercera pista de Narita estará terminada en 6 años, con lo cual el número de usuarios del aeropuertos será mayor.
El operador estima que para entonces necesitará aproximadamente 70.000 trabajadores.
La difícil situación repercute en los negocios (tiendas, restaurantes, etc.) en Narita, cuyo número (619) ha disminuido un 8 % con respecto a 2017. (International Press)