Un hincha del equipo de béisbol de Yokohama, los Baystars, se convirtió el domingo 1 de octubre en protagonista de un insólito incidente mientras realizaba una transmisión en vivo.
El hombre en estado de ebriedad, con una camiseta y gorra de su equipo que ese día había ganado un juego, recorría una zona de bares cuando vencido por el sueño se sentó en la entrada de un edificio.
Apoyó la espalda en una pared y cayó dormido. La transmisión en vivo continuó.
Su teléfono apuntaba a su cara.
De pronto, otro hombre entró en escena. Solo se vio su mano, que la metió en el bolso del durmiente, de donde extrajo una billetera, revela el portal SoraNews24.
El ladrón se alejó.
La víctima, dormida aún, cambió de postura o hizo un movimiento involuntario que alteró la posición original del teléfono, pues su rostro dejó de verse y la pantalla se puso negra.
El incidente no acabó allí. Alrededor de media hora después, el ladrón volvió al lugar y cogió el teléfono mientras su propietario seguía durmiendo.
Sin saber que estaba en medio de una transmisión en vivo, se le escucha hablando con un cómplice y luego subiendo a un coche.
En el automóvil usó su propio teléfono para llamar a una persona a la que dijo que acababa de conseguir el smartphone de un “atún” (aparentemente es una palabra para referirse a alguien borracho e inconsciente).
Más adelante el ladrón entró a un apartamento o la habitación de un hotel, donde se encontró con otro hombre que le preguntó si la víctima tenía mucho dinero (probablemente era la persona con la que había hablado por teléfono).
El delincuente le respondió que no tenía nada de dinero, pero que usó su tarjeta para comprar en una tienda, según la transmisión en vivo.
El incidente llegó a los medios en Japón. Entrevistado por los periodistas, la víctima contó que habían usado su tarjeta para realizar una compra de unos 20.000 yenes (134 dólares) en una tienda de conveniencia. (International Press)
