El gobierno japonés ha decidido entregar 100.000 yenes en efectivo (unos 781 dólares) a los hogares que están exentos del impuesto a la residencia para el año fiscal 2022 como una medida de emergencia ante el aumento de los precios de la energía y los alimentos, así como los efectos del coronavirus.
El dinero de ayuda extraordinaria se incluirá en el paquete de estímulo económico que el gabinete del primer ministro Fumio Kishida presentará a fines de abril. La próxima semana se conocerá la decisión definitiva tras discusiones con el Partido Liberal Democrático y su aliado Komeito.
El gobierno ha decidió proporcionar los 100.000 yenes con financiamiento del presupuesto complementario 2021 que se estableció en diciembre del año pasado y se limitará a los hogares exentos del impuesto a la residencia en el año fiscal que empezó a correr el 1 de abril.
Los precios de la gasolina y otros productos se han disparado por la invasión de Rusia a Ucrania y la depreciación del yen que ha encarecido las materias primas y alimentos importados por Japón.
Los municipios utilizarán la información fiscal de los ciudadanos para notificar por correo a los hogares beneficiarios sobre el sistema de pago y para recabar información de la cuenta bancaria.
El gobierno también ha decidido ayudar con otros 50.000 yenes en efectivo a la crianza de los niños en hogares exentos del impuesto a la residencia. Al mismo tiempo, se está diseñando un plan que permitirá a los gobierno locales brindar apoyo económico adicional, por su cuenta, a las personas más necesitadas de acuerdo a las circunstancias de vida de su jurisdicción. (AG/NI/RI/)
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