Rakuten Group, la gigante de las ventas en línea en Japón, comenzó hoy su campaña de vacunación corporativa contra el coronavirus en la sede de la compañía en Futakotamagawa, en Tokio. Se vacunará a unas 60.000 personas, incluida la familia de los empleados.
Para la inoculación, Rakuten introdujo una entrevista previa con un médico en línea aprovechando el sistema de videoconferencia de Zoom.
La compañía también comenzó a realizar vacunaciones a gran escala en su filial en Kobe donde el sistema toma aproximadamente tres minutos desde la recepción hasta la inyección.
Para sus empleados extranjeros, Rakuten preparó un cuestionario previo en inglés y abrió un carril exclusivo en el que atienden enfermeras bilingües.
Los familiares de los empleados extranjeros que no hablan inglés o japonés reciben una tablet que los interconecta con interpretes a distancia en seis idiomas, incluidos el portugués y el coreano.
TOYOTA COMIENZA SU CAMPAÑA
Entre tanto, Toyota Motor comenzó hoy a las 13.30 horas la vacunación corporativa contra el coronavirus en el gimnasio de su oficina central en la ciudad de Toyota, prefectura de Aichi. Los primeros en ser inmunizados fueron los 300 empleados que trabajan en la cafetería y los guardias de la fábrica.
Toyota tiene como objetivo vacunar aquí a unas 80.000 personas, incluso socios comerciales cercanos hasta mediados de septiembre.
La empresa dijo que aplica el “sistema de producción de Toyota” en el diseño de su centro de vacunación. Se ha marcado una línea de flujo para dar continuidad al servicio desde el registro hasta la inyección. “Podemos hacer un automóvil con la cooperación de la zona circundante. Con este concepto queremos vacunar a la mayor cantidad de personas posible y recuperar la vida antes de la pandemia”, dijo un ejecutivo.
Toyota apoya las vacunaciones masivas de los gobiernos locales y refleja esa experiencia en la campaña iniciada a favor de sus empleados. La hora de la cita se ha fijado en intervalos de 10 minutos para que la inoculación se realice sin problemas y sin necesidad de una silla para sentarse antes de la inyección. (RI/International Press)
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