En septiembre de 2003, un hombre de 26 años, Shinya Kogawa, exgerente de un club de lujo en la prefectura de Chiba, fue asesinado.
Kogawa fue secuestrado por varias personas, estrangulado y descuartizado con una sierra. Su cadáver fue encontrado al mes siguiente en una zona boscosa en Tokio.
La policía arrestó a varias personas por su participación en el crimen, salvo a dos de ellas: So Kamiya y Tomoyuki Matsui. Tras el incidente, los hombres dejaron Japón para huir a Sudáfrica.
Kamiya, de 46 años, fue arrestado a su arribo al Aeropuerto de Narita la semana pasada, procedente de Sudáfrica.
Matsui se habría suicidado en el país africano, según Tokyo Reporter.
En diciembre de 2016, se encontró a un hombre colgado de un árbol en Sudáfrica. Dejó una nota escrita en japonés y la policía confirmará su identidad a través de análisis de ADN.
Matsui habría sido el líder del grupo que cometió los delitos.
Con respecto a Kamiya, este acudió a la embajada de Japón en Sudáfrica el mes pasado para decir que no tenía dinero y que no podía seguir huyendo. El hombre confesó el crimen y expresó su deseo de regresar a Japón.
El asesinato de la víctima se produjo después de que renunció al club y tuvo una disputa por dinero con Kamiya y Matsui. (International Press)
Be the first to comment