Las ventas de automóviles nuevos en Japón en el año fiscal 2018 aumentaron un 1,2 % interanual a 5.259.587 unidades.
Los escándalos que involucraron a varias compañías automovilísticas no hicieron mella en la demanda de coches nuevos, que subió por tercer año consecutivo, destacó Kyodo.
En noviembre pasado, el expresidente de Nissan, Carlos Ghosn, fue arrestado por realizar declaraciones falsas sobre sus ingresos. Además, algunos fabricantes estuvieron en el ojo de la tormenta tras descubrirse que no realizaban inspecciones de los vehículos que producían de manera correcta.
El crecimiento fue posible gracias a los minivehículos (con motores de hasta 660 cc), cuyas ventas se incrementaron un 3,4 % a 1.922.997 unidades. La demanda del resto de automóviles descendió a 3.336.590 (unas 1.600 unidades menos).
Con respecto a los minivehículos, Daihatsu se mantuvo como líder a pesar de que sus ventas cayeron un 0,1 %.
Por su parte, Honda registró un aumento del 8,8 %.
Toyota sufrió una caída del 2,3 %, mientras que las ventas de Nissan y Mazda aumentaron.
En marzo, el último mes del pasado año fiscal, las ventas de automóviles nuevos cayeron un 4 % interanual a 640.811 unidades. El descenso también afectó a los minivehículos. (International Press)
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