El gobierno de Japón continuará con la construcción de una nueva base militar de Estados Unidos en la ciudad de Nago, prefectura de Okinawa, aunque la gran mayoría de okinawenses se haya manifestado en contra del plan.
Así lo dio a conocer el ministro de Defensa de Japón, Takeshi Iwaya, informó Mainichi Shimbun.
Iwaya explicó que la decisión de mantener las obras estaba tomada antes de la realización del referéndum el mes pasado y en el cual más del 70 % votó contra la nueva base, motivo por el cual su resultado (adverso para el gobierno) no tiene ningún efecto práctico.
El alto funcionario dijo que el gobierno japonés busca asegurar que el terreno en el que se asienta la base de Futenma, que será removida y en cuyo reemplazo se levantará la de Nago, sea devuelto a Japón.
Iwaya remarcó que el gobierno ha manifestado de manera constante su intención de no suspender los trabajos en Nago.
El gobernador de Okinawa, Denny Tamaki, deploró la postura gubernamental. «Es extremadamente lamentable que la construcción siga adelante», dijo Tamaki, quien exigió al gobierno la paralización del plan. (International Press)
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