Los policías y bomberos en Japón no pueden ser vistos comiendo o bebiendo mientras están de servicio, ni aunque les ofrezcan comida o bebida. La idea detrás de esta rígida disposición es que deben estar alertas ante cualquier situación de emergencia, no distraídos comiendo o con los manos ocupadas con, digamos, un vaso de café o un refresco.
Sin embargo, las reglas se están flexibilizando. Al menos en el departamento de bomberos de la ciudad de Kimitsu, en la prefectura de Chiba, revela el sitio SoraNews24.
El departamento de Kimitsu ha decidido relajar su código de vestimenta, lo que implica, por ejemplo, que los bomberos uniformados podrán ingresar en las tiendas de conveniencia para comprar alimentos y bebidas.
Los bomberos, por la naturaleza de su tarea, pueden estar varias horas trabajando sin llevarse una gota de agua o un pedazo de comida a la boca. Levantada la prohibición, alimentados e hidratados, podrán salvar vidas y extinguir incendios mejor preparados.
Se espera que la medida entre en vigor a fines de año. (International Press)
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