La oposición en Japón continúa recogiendo testimonios de aprendices extranjeros sobre los maltratos de los que son víctimas (bajos salarios, explotación, etc.), mientras en la Dieta se debate el proyecto de ley presentado por el gobierno de Japón para crear dos nuevas categorías de visado.
La oposición ha exigido al gobierno que priorice la investigación de la situación de los aprendices extranjeros y mejore sus condiciones laborales.
Alrededor de 20 aprendices extranjeros estuvieron presentes en la Dieta, revela Mainichi Shimbun.
Una mujer camboyana de 33 años se quejó: «No se me permite ir al hospital aunque me sienta enferma».
Otros:
«Me hicieron trabajar de 6:30 a. m. a 12 a. m. sin un día libre durante medio año».
«Mi salario por hora extra era de solo 300 yenes (2,63 dólares)».
En el encuentro también hubo abogados que señalaron como prioridad la creación de un sistema que proteja los derechos de los extranjeros.
Hay numerosos casos de aprendices técnicos extranjeros que desaparecen en Japón.
La abogada Kyoko Osaka explicó que los aprendices no tienen posibilidad de cambiar de empleo por su propia voluntad y que aquellos que huyen de sus lugares de trabajo debido a la dureza de las condiciones laborales son considerados como «personas desaparecidas». (International Press)
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