Los grandes eventos deportivos, como un Mundial de fútbol o unos Juegos Olímpicos, son aprovechados por carteristas extranjeros para hacer de las suyas. Las grandes aglomeraciones de gente facilitan los robos.
Durante el Mundial de 2002, la policía de Tokio arrestó a 41 carteristas. 20 de ellos eran extranjeros. Uno dijo: «Los japoneses no están en guardia contra los ladrones, así que es dinero fácil».
Por ello, la policía de Tokio, que en 2020 albergará los Juegos Olímpicos, solicitará información sobre carteristas extranjeros a autoridades y policías de otros países y analizará sus métodos, informó Yomiuri Shimbun.
La policía de Tokio, con apoyo de la Agencia Nacional de Policía de Japón, recogerá información de las autoridades locales sobre robos en importantes eventos como los Juegos de Río de Janeiro 2016 y los Juegos de Invierno de Pyeongchang 2018, en Corea del Sur.
Los datos servirán para saber de qué países proceden los carteristas y cuáles son sus métodos y características.
La policía tokiota también realizará capacitaciones sobre cómo manejar grupos de carteristas armados que llevan cuchillos y otras armas.
Entre 2013 y 2017, Tokio identificó a 812 carteristas. De ellos, alrededor del 10 % eran extranjeros, de países como China y Corea del Sur, así como de regiones más lejanas (Europa del Este y América del Sur).
Se han reportado casos de extranjeros que cometen múltiples robos en un corto período de tiempo y después abandonan Japón.
Además de los Juegos Olímpicos, en 2019 Japón será sede del Mundial de rugby. (International Press)
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