Por suerte lo encontró un buen ciudadano y no un delincuente. La policía de Japón lamentó un incidente causado por el descuido de un oficial que dejó caer su arma en una calle en la prefectura de Wakayama.
El policía formaba parte del convoy de vehículos que protegía al primer ministro de Japón, Shinzo Abe, precisó la agencia Kyodo.
Katsuro Matoba, jefe de la división de seguridad de la policía de Wakayama, calificó como “muy lamentable” lo ocurrido y prometió realizar todos los esfuerzos posibles para que la situación no se repita.
El incidente ocurrió el viernes en la noche, mientras Abe se dirigía a Kioto después de pronunciar un discurso en una reunión en Wakayama como parte de su campaña para la elección del líder del Partido Liberal Demócrata.
El policía, un hombre en la veintena, se asomó por la ventana del vehículo para controlar el tráfico cuando el arma automática se deslizó fuera de su funda y cayó en la carretera. El botón de la funda se desabrochó al entrar en contacto con el marco de la ventana.
Unos 50 policías se lanzaron en la búsqueda del arma caída. El arma, que estaba cargada, fue encontrada por un residente que la entregó a uno de los oficiales.
Los policías no dijeron qué buscaban a los residentes. Una mujer que vive por la zona donde cayó el arma dijo que los oficiales tocaron la puerta de su casa y le preguntaron si podían entrar para buscar un “objeto perdido”. La mujer después se enteró de la verdad. “Nunca hubiera imaginado que estaban buscando una pistola”, dijo a Kyodo.
Otro residente contó que supo la verdad por la TV y criticó que la policía tardara en informar al público.
La policía, que hizo público el incidente durante la madrugada del día siguiente, se disculpó por no haber informado antes. (International Press)
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