Polonia ya está eliminada y no se juega nada, pero será un rival peligroso. Japón no se confía.
En declaraciones recogidas por Associated Press, el técnico japonés Akira Nishino dijo que la selección polaca jugará por el orgullo y se refirió a Robert Lewandowski como un goleador de primera clase, un delantero que siempre quiere anotar.
No existe partido que carezca de importancia, dijo Nishino, para subrayar que aunque no se juegue la clasificación, Polonia valora el enfrentamiento con Japón.
Lo confirmó el técnico de Polonia, Adam Nawalka, que dijo que el partido contra los japoneses será “un juego de honor”.
Aunque el arquero Eiji Kawashima falló contra Senegal, permitiendo el gol de Sadio Mane tras un mal despeje, y Nishino dijo que evaluaría su situación, el veterano jugador formaría parte del once titular.
Un día antes del decisivo partido, Kawashima apareció al lado de Nishino en una conferencia de prensa, lo que sugiere que se mantendrá en el arco nipón.
Si Kawashima se cuadra en la portería japonesa, tendrá la difícil tarea de evitar que anote el goleador del Bayern Munich.
Así como sus compañeros lograron el empate ante Senegal tras su error, ayudándolo a superar el mal trago, contra Polonia el arquero espera ayudar a sus compañeros.
Japón solo necesita un empate para clasificar a octavos de final, donde se mediría con Inglaterra o Bélgica, dos de las selecciones más goleadoras del torneo.
Polonia llegó con grandes expectativas al Mundial tras ganar ocho de sus diez partidos en las eliminatorias. Sin embargo, perdió contra Senegal y Colombia y solo convirtió un gol.
Como datos estadísticos a tomar en cuenta, AP recuerda que en sus dos anteriores participaciones mundialistas, en 2002 y 2006, Polonia perdió sus dos primeros partidos y ganó los de cierre, contra Estados Unidos y Costa Rica. (International Press)
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