En declaraciones recogidas por la agencia Kyodo, Abe dijo que el respaldo que ha recibido de los votantes lo ha ayudado a superar los desafíos que ha enfrentado en los cinco años.
Por su parte, el ministro portavoz de su gobierno, Yoshihide Suga, dijo que la prioridad del gobierno continuará siendo el fortalecimiento de la economía.
Suga subrayó que la recuperación económica es la principal prioridad.
La economía de Japón está en su segunda fase de expansión más larga de la posguerra. El índice Nikkei está en su nivel más alto desde enero de 1992.
No obstante, muchos japoneses no sienten los efectos de la recuperación económica y Abe aún tiene pendiente alcanzar uno de sus principales objetivos: sacar al país de varias décadas de deflación.
Abe ha logrado mantener unos índices de aprobación relativamente estables. El 47,2 % aprueba su gestión, según cifras de este mes.
El gobernante nipón espera ser reelegido como presidente del Partido Liberal Demócrata en septiembre de 2018. De conseguirlo, podría convertirse en el primer ministro de Japón de mayor duración en noviembre de 2019 (incluyendo su primer periodo).
Otro objetivo prioritario de Abe es revisar la Constitución pacifista de Japón, para adecuarla a los desafíos que supone la creciente amenaza norcoreana o el poderío militar chino.
Por otro lado, Abe busca resolver una disputa territorial con Rusia por las islas Kuriles y albergar en Japón una cumbre trilateral con China y Corea del Sur. (International Press)
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