El gobierno de Japón tiene previsto establecer un impuesto de salida de 1.000 yenes (8,79 dólares) a todo los viajeros que dejen el país (extranjeros y japoneses) desde el año fiscal 2019, informó Asahi Shimbun.
El Ejecutivo nipón préve recaudar 40 mil millones de yenes (350 millones de dólares) a través del llamado “impuesto sayonara”. El tributo se añadirá a los pasajes.
En 2016 se registraron 40 millones de salidas de Japón, entre ellos de 17 millones de japoneses.
El dinero será destinado a la promoción del turismo. Sin embargo, otros entes gubernamentales, además de la Agencia de Turismo de Japón, podrán utilizar los fondos.
Por ello, existe la preocupación de que los recursos generados se empleen en otros asuntos, que poco tienen que ver con el turismo, si otras oficinas gubernamentales tienen acceso a los fondos.
Los 40.000 millones de yenes casi duplican los 21.000 millones de yenes (184 millones de dólares) de presupuesto de la Agencia de Turismo de Japón para el año fiscal 2017.
Para cumplir el objetivo de alcanzar los 40 millones de turistas extranjeros en 2020, el gobierno japonés busca invertir más en publicidad, lo que requiere un mayor presupuesto.
Sin embargo, preocupa que la medida pueda ser contraproducente al aumentar los costos de viaje sobre todo para los usuarios de líneas aéreas de bajo coste. También podría afectar los viajes de japoneses al extranjero. (International Press)
Be the first to comment