23 de las víctimas residían en la isla de Izu Oshima
Las autoridades japonesas elevaron el viernes a 26 el número de fallecidos por el tifón Wipha, que el pasado jueves afectó a gran parte del país, mientras continúa la búsqueda de casi treinta desaparecidos.
Miles de policías, bomberos y militares continúan las labores de rescate en la isla de Izu Oshima, situada a 100 kilómetros al sur de Tokio, y que fue la más afectada por el temporal, ya que las fuertes lluvias derrumbaron una enorme ladera que arrasó prácticamente todo a su paso.
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, visitará el próximo domingo esa isla de 8.300 habitantes donde se han registrado hasta ahora 23 víctimas, y en la que las autoridades locales cifraron en 280 las casas dañadas por corrimientos de tierra causados por las precipitaciones.
El equipo de forenses ha identificado 13 cuerpos de los 23 que fueron encontrados en la isla, según informaron fuentes locales a la agencia de noticias Kyodo.
Por su parte, representantes del gobierno municipal de Oshima y el ministro de fomento nipón, han manifestado que harán «todo lo posible» para evitar otro desastre similar en la isla, puesto que prevén fuertes lluvias para este fin de semana.
En este sentido, las autoridades han alertado de que el tifón Francisco, el número 27 de la temporada detectado en el Pacífico, se dirige hacia la isla.
La marina japonesa ha enviado un total de 130 ingenieros, camiones, y palas hidráulicas para apoyar los trabajos de restauración en la zona.
El número de heridos se mantiene en 89, cifra que excluye a los que viven en Izu Oshima, según datos policiales. (EFE)