Para educar a nuestros hijos no necesariamente tenemos que seguir el mapa que nos legaron nuestros padres sino darles las herramientas para que sigan su propio mapa, dice la psicóloga Aráuz.
Por la psicóloga Irma Aráuz:
En el camino de la vida aprendemos a ser padres sin que nadie nos haya enseñado. Es un aprendizaje natural, arduo muchas veces, puesto que nuestros padres en su momento tampoco sabían como hacerlo. Podemos, imitarlos y seguir el “mapa” que nos enseñaron, pero también podemos aprender a ser diferentes, aprender a informarnos en buenos libros, acudir a personas que puedan orientarnos y así estar preparados para orientar mejor a nuestros hijos.
Herramientas hay muchas, somos conscientes de ellas, pero en la práctica nos cuesta educar “bien” a nuestros hijos. Queremos que se comporten como “debe ser”, y nos cuestionamos o nos culpamos si no responden a ese “debe ser”. ¿Pero por qué tiene que ser así y no de otra manera? ¿por qué tienen que seguir el mapa que nos legaron nuestros padres?
Hay 4 maneras que nos muestran de cómo no respetamos a nuestros hijos: juzgando, ayudando, diciendo lo que “se debe”, y explicando.
Juicio: Cualquier juicio, desprecio, risa burlona, etc., es una condenación de la experiencia, y no alentará a las personas a explorarse más profundamente. Al juzgar, te culpo y te condeno por mi experiencia.
Ayuda: Una de las maneras más comunes de no respetar la experiencia de una persona es apresurarse para ayudar cuando se está sintiendo mal o incómoda. El ayudar con reafirmación, chistes, confort, etc., impide a la persona experimentar su pesar, enojo, soledad, etc. La manera de ayudar realmente a alguien no es ayudarle a nada, excepto a darse cuenta de su propia experiencia.
“Debes de”: Si de alguna manera implicas que una persona “debe de” tener cierto tipo de experiencia particular, la persona se alejará más de su propia experiencia y llenará su vida más de “debes de”. En todo caso sólo hay un “debes de”: que debes ser lo que en realidad eres en este momento.
Explicar: Buscar causas y razones, interpretar y explicar, todas son manera de “comprender” tu experiencia; pero en realidad son formas de “evitar” tu experiencia. Tan pronto como empiezas a explicar tu experiencia, comienzas a perder contacto con la experiencia misma y te pierdes en una jungla de porqués, síes condicionales y peros.
Hemos dado a luz a seres individuales, aprender a aceptarlos tal y como son, implica primero el aprender a aceptarnos y respetarnos a nosotros mismos tal y como somos, para darles las herramientas necesarias para que ellos sigan su propio mapa.
*La psicóloga Irma Aráuz atiende directamente en el teléfono 090-2553-3307 y en el e-mail consultasairma@live.com.ar.
Descubre más desde International Press - Noticias de Japón en español
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
Be the first to comment