La policía de Niigata arrestó a cuatro hombres de nacionalidad camboyana acusados de robar dos toneladas de cables de cobre, valoradas en unos 3 millones de yenes (aproximadamente 20.300 dólares), de una planta de energía solar ubicada en la ciudad de Tainai. Los sospechosos ingresaron durante la noche y cortado los cables en tramos manejables para luego transportarlos en un vehículo.
Los detenidos fueron identificados como Sarik Devit y otros tres compatriotas, todos antiguos becarios del programa de formación técnica (gino jisshusei) en Japón. El delito se habría cometido en mayo de este año, cuando el grupo, junto con al menos una persona aún no identificada, sustrajo el material desde la planta solar.
El cobre sustraído, de gran demanda en el mercado negro, fue cuidadosamente seleccionado para facilitar su traslado. La policía investiga si el destino del metal estaba relacionado con redes de reventa internacional.
De acuerdo con la investigación, los cuatro hombres se habrían conocido en Japón mediante redes sociales, lo que facilitó la organización del delito. Hasta el momento, ninguno de los sospechosos ha admitido o negado los cargos, según informó la policía local. (RI/AG/IP/)
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