La película japonesa de acción real «Kokuho» (National Treasure), protagonizada por el aclamado actor Ryo Yoshizawa, ha superado los 10.000 millones de yenes (unos 68 en ingresos de taquilla. Este logro marca un hito sin precedentes en la industria cinematográfica japonesa, siendo la primera película en conseguirlo en 22 años, desde el éxito de «Odoru Daisousasen THE MOVIE 2: Rainbow Bridge wo Fuusa Seyo!» en 2003.
En un comunicado emitido hoy, los productores anunciaron que, en sólo 73 días desde su estreno, la película ha recaudado 10,5 mil millones de yenes y ha atraído a más de 7,47 millones de espectadores. Este éxito la posiciona como la tercera película de acción real más taquillera en la historia de Japón, solo por detrás de las icónicas «Odoru Daisousasen THE MOVIE 2» (17,35 mil millones de yenes) y «Nankyoku Monogatari» (11 mil millones de yenes).
UN TRIUNFO DE PASIÓN
«Kokuho», basada en la novela homónima de Shuichi Yoshida, es un drama humano que narra la vida de 50 años de Kikuo Tachibana (interpretado por Ryo Yoshizawa), un joven que, nacido en una familia yakuza, es adoptado por una familia de actores de kabuki y dedica su vida a este arte tradicional.
El éxito de la película ha sido celebrado por sus protagonistas y el director. En una emotiva declaración, el actor Ryo Yoshizawa expresó su gratitud: «Me uní a este proyecto con la intención de crear una película que, aunque sea para unos pocos, acompañe la vida de quienes la vean y sea atesorada en sus corazones. Que tantas personas la amen, no me deja más que gratitud».
Por su parte, el actor Ryusei Yokohama destacó la importancia de la película para el arte del kabuki: «Me siento feliz y agradecido de que esta película haya llegado y sea amada por tantas personas. Siento una responsabilidad aun mayor para ayudar a desarrollar el cine japonés. Espero que quienes vean la película se interesen por el kabuki real; eso significaría que he cumplido un poco mi misión».
El veterano actor Ken Watanabe se mostró conmovido por la respuesta del público. «Me siento muy feliz y sorprendido de que tantas personas hayan acudido al cine. El esfuerzo y la pasión de todo el equipo y el elenco han sido recompensados. Es un honor haber participado en una película que dejará huella en la historia del cine».
Finalmente, el director Sang-il Lee describió la experiencia como algo «que solo había visto en películas antiguas». Se mostró agradecido con el público, desde jóvenes hasta personas mayores, que han abarrotado las salas y han acudido varias veces a ver la película. «El cine es maravilloso, vale la pena luchar por él», concluyó. (RI/AG/IP/)
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