Las autoridades de Hokkaido confirmaron hoy la muerte de Keisuke Soda, un montañista de 26 años, residente en Tokio, que había desaparecido ayer por la mañana tras ser atacado por un oso pardo en el monte Rausu (1.661 metros), en la península de Shiretoko, localidad de Shari.
Según la policía de Hokkaido, el joven fue localizado en la montaña durante las labores de búsqueda en las que también se usaron perros adiestrados, drones y un helicóptero. A las 13:05 horas de hoy, el equipo de rastreo avistó a tres osos pardos, una hembra adulta y dos crías, cerca de donde se había denunciado el ataque. Cazadores autorizados dispararon y abatieron a los tres animales. Las autoridades investigan si alguno de ellos fue el que atacó a la víctima.
A unos metros del sendero donde se produjo el ataque, se encontraron una camisa azul rota, una billetera, un reloj de pulsera y una gorra. En la prenda y en el terreno circundante, como entre los árboles y el suelo, había manchas de sangre.
Según informó la policía, tras escuchar el relato del acompañante, éste se encontraba caminando unos 200 metros detrás de Soda, separado por otro excursionista. Al escuchar los gritos de “¡Ayúdame!”, corrió apresuradamente hacia Soda, pero el animal lo arrastró hacia el interior de la vegetación.
El amigo declaró: “Llegué a golpeé al oso con las manos. El brazo con el que lo golpeé quedó cubierto de sangre”. Se cree que el oso ya tenía sangre de Soda en su cuerpo. Temiendo por su propia vida y consciente de la necesidad de pedir ayuda de inmediato, el amigo regresó al sendero y dio aviso a las autoridades.
Las tareas de búsqueda comenzaron la mañana hoy con un equipo de 18 personas, incluyendo policías, guardabosques y cazadores, que peinaron la zona hasta dar con el cuerpo. (RI/AG/IP/)
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