Estados Unidos ha desplegado bombarderos furtivos B2 capaces de transportar bombas perforadoras de búnker, conocidas como “bunker buster”, en un movimiento destinado a intensificar la presión militar sobre Irán, en plena escalada de tensiones por su programa nuclear y su conflicto con Israel.
Según informó hoy el diario The Wall Street Journal, aviones B2 partieron desde la Base Aérea de Whiteman, en Misuri, hacia el Pacífico la noche del 20. Datos de seguimiento aéreo confirmados por CNN indican que las aeronaves se dirigen a la base Andersen en Guam, territorio estadounidense estratégico para operaciones en Medio Oriente y Asia.
Aunque no se ha emitido una orden formal de ataque, fuentes del Departamento de Defensa afirmaron que el despliegue tiene como objetivo “ofrecer opciones al presidente” Donald Trump. La medida coincide con las declaraciones del mandatario, quien afirmó que decidirá “en un plazo de dos semanas” si lanza una ofensiva contra instalaciones nucleares iraníes, como la de Fordow, ubicada a entre 80 y 90 metros bajo tierra.
El B2 puede transportar el misil guiado GBU-57, una bomba de 13,6 toneladas capaz de penetrar hasta 61 metros bajo tierra antes de detonar. El Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS) estima que EEUU dispone de unas 20 de estas armas. Según la experta Heather Williams, un ataque repetido con estas bombas podría destruir incluso estructuras subterráneas reforzadas, aunque advierte que no se conoce con precisión el diseño interno de Fordow.
Trump ha dejado claro que no tolerará más dilaciones en las negociaciones nucleares con Irán. Ha calificado de “última advertencia” el plazo de dos semanas y exige concesiones inmediatas. A la vez, ha evitado comprometerse a exigir a Israel que detenga los ataques sobre territorio iraní, una condición que Teherán considera indispensable para entablar diálogo.
Este despliegue militar se produce mientras EEUU refuerza su presencia naval en la región, en un contexto de tensión creciente y escasa efectividad de la mediación europea. El presidente estadounidense asistirá esta tarde (hora local) al Consejo de Seguridad Nacional en Washington para evaluar la situación con su gabinete. (RI/AG/IP/)
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