La selección japonesa de fútbol goleó 6-0 a Indonesia en el Estadio de Suita, cerrando con contundencia la última jornada del Grupo C en las Eliminatorias Asiáticas rumbo al Mundial 2026.
Desde el primer minuto, el equipo dirigido por Hajime Moriyasu fue superior. El entrenador realizó nueve cambios respecto al once titular que perdió ante Australia, apostando por nuevas caras. Y le funcionó: Kamada Daichi marcó un doblete en la primera mitad, el capitán Takefusa Kubo aportó un gol con clase, y Ryoya Morishita celebró su primer tanto con la camiseta nacional. Los otros dos goles fueron de Shuto Machino y Mao Hosoya.
El dominio de Japón fue total. Indonesia no pudo realizar ni un solo disparo al arco, mientras los locales presionaban alto y mantenían la posesión. Mito Shunsuke y Suzuki Junosuke debutaron con buenas actuaciones, y el joven Sato Ryunosuke (18) se convirtió en el jugador más joven en disputar un partido de eliminatorias finales para Japón.
Otro momento destacado fue la entrada al campo de los hermanos Sano (Kaishu y Kodai), algo que no ocurría desde los hermanos Miura en 1993.
Moriyasu destacó el rendimiento colectivo: “Los jugadores rompieron sus propios límites. Pero de aquí al Mundial, necesitamos mejorar todos los aspectos del juego”.
Con esta goleada, Japón no solo asegura su boleto al siguiente tramo de la eliminatoria, sino que también deja claro que su generación renovada está lista para competir al máximo nivel. (RI/AG/IP/)
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