La ciudad de Himeji, en Hyogo, ha decidido aumentar el precio de entrada al castillo de Himeji, declarado Patrimonio de la Humanidad y Tesoro Nacional, para los visitantes no residentes. La nueva tarifa, que pasará de los actuales 1.000 yenes (6,80 dólares) para los mayores de 18 años, se fijará entre 2.000 y 3.000 yenes (13,60 – 20,40 dólares), un incremento de 2 a 3 veces el costo actual.
Este ajuste tiene como objetivo asegurar fondos para la conservación y el mantenimiento del castillo, cuya infraestructura requiere una inversión significativa, incluyendo la mejora de la resistencia sísmica de los muros.
El alcalde de Himeji, Hideyasu Kiyomoto, había sugerido en junio durante una conferencia de prensa, que los extranjeros pagaran aproximadamente 30 dólares, mientras que los residentes de Himeji podrían abonar solo 5 dólares.
La propuesta inicial contemplaba un aumento exclusivo para los turistas internacionales, pero tras recibir críticas en el gobierno municipal sobre el impacto negativo en la imagen del castillo, se ha optado por una revisión más equilibrada.
Como parte de la nueva estrategia, se implementarán nuevas ofertas para los visitantes internacionales, que incluirán descuentos en restaurantes y servicios de custodia de equipaje, entre otras ventajas. El precio específico de estas ofertas aún está por determinarse, pero la intención es proporcionar un valor añadido a los turistas extranjeros.
En comparación con otras atracciones en Japón, Himeji se destaca por su política de precios. El Castillo de Osaka, por ejemplo, incrementará su tarifa a 1.200 yenes (8,20 dólares) en 2025, coincidiendo con la Expo 2025 en Osaka y Kansai. El Castillo de Matsumoto, otro Tesoro Nacional, también aumentará su entrada a partir de abril próximo, con precios de 1.200 yenes para entradas electrónicas y 1.300 yenes (8,90 dólares) para entradas en papel. Otros castillos como el de Hikone, Inuyama y Matsue están considerando ajustes similares en sus tarifas.
A nivel internacional, varios destinos turísticos aplican precios diferenciados para extranjeros y locales. Por ejemplo, Machu Picchu en Perú cobra aproximadamente el doble a los turistas extranjeros en comparación con los ciudadanos peruanos. De manera similar, el Taj Mahal en India establece tarifas significativamente más altas para los visitantes internacionales.
Himeji tiene previsto implementar estos cambios en los precios alrededor de la primavera de 2026, en coordinación con el Ministerio de Cultura de Japón. (International Press)
