La Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA) trabajará con el gobierno de Vietnam y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para aliviar las cargas financieras de los aprendices que vienen a Japón, según fuentes cercanas al tema.
JICA y sus socios crearán un mecanismo que exigirá a los empleadores japoneses de aprendices vietnamitas pagar más de la mitad de las tarifas de contratación cobradas por las agencias vietnamitas que reclutan aprendices y los envían a Japón.
El actual programa de formación de pasantes técnicos de Japón ha generado críticas internacionales, ya que los trabajadores vietnamitas que participan en el programa a menudo tienen que pedir prestado una gran cantidad de dinero para trabajar en el país.
Los vietnamitas que vienen a Japón pagan un promedio de 656.000 yenes (4.156 dólares) a las agencias de contratación locales para cumplir con los requisitos laborales, como el dominio del idioma japonés. Eso es 1,4 veces el ingreso anual del vietnamita promedio, y los inmigrantes a menudo piden prestado enormes sumas de dinero para hacer el viaje. (RI/NI/)