Bryan Jefferson Lising Dela Cruz, el filipino de 34 años arrestado por colocar los cadáveres de una pareja de japoneses debajo del piso de su casa en el distrito de Adachi, Tokio, dijo que actuó por pedido de su compatriota Hazel Ann Baguisa Morales, informa Asahi Shimbun.
La mujer de 30 años también fue arrestada por abandono de cuerpo.
Las víctimas, desaparecidas desde el 16 de enero, fueron encontradas dos días después.
La pareja de japoneses fue acuchillada varias veces en el pecho. En su casa se hallaron manchas de sangre, algunas de las cuales pertenecían a Dela Cruz, según análisis de ADN.
Además, el filipino fue tratado en un hospital por una herida en la mano.
El hombre habría sido herido mientras atacaba a la pareja de japoneses y estos oponían resistencia.
Una cámara de seguridad en el barrio donde vive Morales registró a dos personas -que serían los filipinos- botando ropa manchada con sangre en una zona de recolección de basura.
Dela Cruz y Morales, que asegura ser inocente, se conocen desde Filipinas.
Dela Cruz, que vive en la prefectura de Ibaraki, ha ingresado a Japón dos veces como aprendiz. La última fue en julio de 2023 para trabajar en una empresa relacionada con la construcción.
Un funcionario de alto rango de una organización supervisora que se encarga de los aprendices extranjeros en Japón dijo que el filipino era reconocido como un trabajador “excelente”.
Además, le dijeron que era una persona cálida y que trabajaba duro para su familia en su país. “Todavía no puedo creer (su arresto)”, dijo.
Con respecto a Morales, la mujer fue pareja del hijo mayor de los esposos asesinados y le debía varios cientos de miles de yenes. (International Press)