Un revisor hace una ronda en un tren expreso limitado. Ve a una persona que ocupa un asiento no vendido, le pide que verifique su boleto y, como está sentada en un lugar que no le corresponde, está a punto de solicitarle que se mueva al que le toca.
El pasajero se le adelanta: “¡Pensaste que no tenía un boleto expreso! ¡Muérete! ¡Nunca volveré a usar tu servicio!”.
Este incidente es uno de los 1.124 casos de acoso o abuso contra empleados de tren por parte de pasajeros, así como de pedidos absurdos y malos comportamientos de los usuarios en el año fiscal 2022, informa Mainichi Shimbun.
Un ejemplo de pedido absurdo:
Un sábado de octubre, un accidente interrumpe el servicio de trenes. Debido a ello, una persona que tenía previsto ir al cine no llega a tiempo y le exige al empleado encargado de los tickets de la estación que le pague el costo de la entrada al cine.
Naturalmente, el trabajador se niega, pero la persona pierde los papeles y le dice: “Quiero preguntarte por qué no puedes pagar. Dímelo”.
Un caso de abuso:
Es Golden Week y una persona joven toma el último tren en estado de ebriedad. Se queda dormida, no se baja en la estación que deseaba y llega hasta la parada final.
Una vez allí, le exige a un empleado de la estación que chequee el precio de un taxi que lo lleve hasta su destino. Mientras el trabajador hace lo que le pide, el pasajero se impacienta. “¿Aún nada?”, le dice. “Eres demasiado lento”.
Además, lo insulta, le hace preguntas personales (su edad, de dónde es, si tiene amigos) y lo cubre de gritos durante unas dos horas hasta que toma un taxi. El incidente retrasa mucho el cierre de la estación.
Un cuarto caso:
Una persona solicita un cambio de boleto y el reembolso correspondiente.
Mientras el empleado de la estación explica con detalles el procedimiento, la persona lo interrumpe para decirle con rudeza: “Mi hijo se ha molestado porque eres demasiado lento. Lo publicaré en las redes sociales, tengo una gran cantidad de seguidores”.
El 30 % de los pasajeros abusivos estaban ebrios en el momento del incidente.
Las tres prefecturas con más ataques reportados fueron Kanagawa (220), Tokio (178) y Osaka (173).
El gobierno de Japón ha tomado algunas medidas para prevenir los abusos, como la elaboración de un manual para actuar en caso de ataques. Además, ha pedido a las compañías de tren que investiguen los casos y los recopilen. (International Press)