En la imagen, los taxis de Uber se promocionan con un gran aviso publicitario en la estación de Yokohama JR. Por ahora, las regulaciones japonesas limitan este servicio solo a algunas áreas y bajo ciertas condiciones. Por ahora hay Uber en el área de Yokohama y Kawasaki.
Por ejemplo, las empresas de taxis están obligadas por ley a comprobar que los conductores no consuman alcohol y que gocen de un estado de salud adecuado para conducir vehículos. En la actualidad no hay manera confiable que controle el cumplimiento de estas premisas entre choferes particulares de taxis.
Hay propuestas para exigir que los conductores particulares de taxis controlen su salud, se inscriban en un seguro e instalen cámaras que supervisen su conducción. La legislación deberá determinar si la responsabilidad de los accidentes recae en el conductor particular o en la plataforma de transporte tipo Uber.
Entre tanto, lunes de esta semana, un panel de reforma regulatoria del gobierno japonés recomendó para el próximo año una nueva ley que levantaría todas las prohibiciones contra el negocio del taxi particular. (RI/International Press)