El presidente de la compañía de teatro musical Takarazuka Revue, Kenshi Koba, anunció el martes que renunciará a su cargo para asumir la responsabilidad por la muerte de una de sus actrices.
Koba ofreció disculpas a la familia de la mujer de 25 años por “no poder proteger la vida de su ser querido”, cita Kyodo.
Sin embargo, dijo que un equipo de investigación externo, compuesto sobre todo por abogados, no ha encontrado evidencia de ijime contra la mujer, contradiciendo la versión de la familia, expresada por su abogado.
De acuerdo con el abogado, la actriz se suicidó debido al exceso de trabajo y el bullying y la familia exige que la compañía, además de disculparse, pague una compensación.
El abogado sostiene que la actriz era blanco de ijime por parte de miembros de alto rango del grupo.
Sin embargo, el informe encargado por Takarazuka, famoso colectivo teatral integrado solo por mujeres, dice que las duras reprimendas de las veteranas caían dentro del alcance de lo que denomina “orientación” a la joven.
El abogado criticó dicha postura, que refleja “un pensamiento basado en valores obsoletos”.
El comité investigador reconoce la posibilidad de que la actriz estuviera bajo una “fuerte carga psicológica” justo antes de su muerte y, hablando en términos generales, señala que el apretado calendario de actuaciones del grupo afectó el bienestar físico y mental de las artistas.
La compañía anunció la implantación de una serie de medidas para mejorar las condiciones laborales de su personal.
El abogado también arremetió contra este punto del informe por subestimar la carga de trabajo que soportó la actriz. El mes previo a su muerte hizo 118 horas extra, según el reporte.
Sin embargo, en realidad trabajó 277 horas extra mensuales, corrigió el letrado. (International Press)