La policía de la prefectura de Osaka arrestó a 31 personas tras hacer una redada en un casino ilegal de bacará el domingo.
El gerente del lugar, un hombre de 41 años, fue uno de los arrestados, detalla Kyodo.
Con él, atraparon a 29 empleados y clientes.
Algunos clientes lograron escapar huyendo por unas escaleras ocultas en el segundo piso.
El casino funcionaba en el tercer y cuarto piso de un edificio de inquilinos las 24 horas del día.
Para acceder a él, había que franquear una entrada con doble puerta cerrada con llave.
Una cámara revisaba los rostros de los clientes antes de desbloquear la puerta.
La apuesta mínima era de 30.000 yenes (200 dólares).
La policía llegó al local tras el arresto, un día antes, de un cliente. (International Press)