Hace unos 30 años, Hayashi denunció que Johnny Kitagawa, fundador de la agencia de talentos Johnny & Associates, habia abusado sexualmente de él.
No le dieron crédito a su testimonio e incluso lo llamaron mentiroso. Y Kitagawa continuó siendo un hombre poderoso hasta que murió en 2019.
Aunque Kitagawa ya no esté vivo para pagar por sus delitos, en 2023 el contexto es muy distinto del de la década de 1990.
Ahora sí le creen y su testimonio tiene valor.
Hayashi (un seudónimo), hoy un hombre en la cincuentena, relata su historia a Asahi Shimbun.
Era un estudiante de tercer año de secundaria cuando fue a una entrevista con Kitagawa y se unió a su agencia como aspirante a aidoru.
Hayashi practicaba canto y baile como parte de su entrenamiento para llegar al estrellato.
Un día, mientras dormía en una residencia de la agencia en Tokio, Kitagawa entró en la habitación, le masajeó las piernas, tocó sus genitales y le hizo sexo oral.
Fue el primero de más de diez abusos sexuales perpetrados por el empresario.
Hayashi dejó la agencia cuando estaba en preparatoria.
En aquella época leyó un libro de Koji Kita, una exestrella de la agencia, en el que revelaba que Kitagawa había abusado de él.
Hayashi se contactó con Kita y una nueva versión del libro del segundo incluyó la experiencia del primero.
Fue entonces que tacharon de mentiroso a Hayashi.
Transcurrieron los años y las denuncias contra Kitagawa parecían perderse definitivamente en el olvido.
Sin embargo, en marzo de este año la BBC publicó un documental sobre Kitagawa que incluye la historia de Hayashi.
Otras víctimas han hablando desde entonces.
“Ya no quiero que esto se esconda debajo de la alfombra”, dice el hombre a Asahi.
Para ello es fundamental que más víctimas de Kitagawa hablen, que celebridades del mundo del espectáculo alcen sus voces.
Hayashi cree que muchos famosos también sufrieron abusos pero callan. Aún prevalecen los prejuicios contra las víctimas masculinas, afirma.
Aún así, espera que hablen públicamente.
Los abusos no eran un secreto en la agencia.
Hayashi recuerda que los artistas adultos de Johnny & Associates, conscientes de su situación, lo consolaba, pero no lo ayudaban.
“Para decirlo con dureza, no hacer nada mientras se ve a jóvenes siendo abusados sexualmente equivale a ser cómplice de un crimen”, declara.
Por último, espera que la agencia, que ha ofrecido disculpas a las víctimas, investigue a fondo los hechos y admita su responsabilidad para que no se repitan los delitos. (International Press)