Un café ubicado en Asakusa, Tokio, ofrece a sus clientes la oportunidad de convertirse en ninjas por un momento.
Sus empleados entrenan a los visitantes, vestidos como ninjas, en el uso de cerbatanas y el lanzamiento de shuriken, armas arrojadizas en forma de estrella.
Tras la devastación causada por la pandemia, el establecimiento se está llenando nuevamente de turistas extranjeros.
El problema es que el café no cuenta con superficie personal y es difícil contratar a nuevos empleados ninjas, revela la NHK.
Durante la pandemia, había días en los cuales el café no tenía reservas, razón por la cual tuvo que despedir trabajadores y recortar los días de atención.
Cuando el gobierno de Japón flexibilizó los controles fronterizos para permitir el ingreso de los turistas extranjeros, el café comenzó a atender diariamente.
En octubre pasado tuvo aproximadamente 300 clientes.
Poco a poco las cosas comenzaron a mejorar, y en abril acogió a más de mil turistas extranjeros, una cifra prepandémica.
Sin embargo, ante la escasez de personal están rechazando algunas reservas.
Así las cosas, un representante del café advierte en declaraciones a la NHK de que necesitan más empleados ninjas para mantener el negocio en marcha. (International Press)