Una mujer ugandesa sobre la cual recaída una orden de deportación por parte del gobierno japonés podrá quedarse en Japón.
El gobierno de Japón decidió no apelar el fallo del Tribunal de Distrito de Osaka, que le otorgó el estatus de refugiada el 15 de marzo, informa Mainichi Shimbun.
Maya Kawasaki, la abogada de la ugandesa, declaró a Mainichi que era “natural” que el gobierno no apelara considerando la contundencia de los hechos.
Asimismo, espera que la Agencia de Servicios de Inmigración de Japón oficialice lo antes posible la condición de refugiada de su clienta.
La mujer huyó de Uganda, donde era perseguida por ser lesbiana e incluso fue agredida por un policía, y aterrizó en Japón en 2020.
El gobierno japonés rechazó su solicitud de asilo y estuvo detenida. Actualmente, la ugandesa, una treintañera, está en libertad provisional y reside en la región de Kansai.
En su fallo del 15 de marzo, el Tribunal de Distrito de Osaka falló a favor de la mujer tras considerar que si era deportada a Uganda podría ser perseguida.
En Uganda, los actos sexuales entre personas del mismo sexo son ilegales y el castigo puede llegar hasta la cadena perpetua.
El caso de la ugandesa sería el primero en Japón de una persona a la que se le otorga el estatus de refugiada debido a su pertenencia a una minoría sexual a través de una decisión judicial. (International Press)
