Tras estar alrededor de diez días huyendo de la policía, un helper (cuidador) fue atrapado en la ciudad de Sapporo, prefectura de Hokkaido.
Takashi Kikuchi, de 50 años, asesinó a una residente de 92 años en el asilo en Tokio donde trabajaba el 15 de septiembre, informó Mainichi Shimbun.
La víctima, Yoko Yamanobe, fue encontrada con fracturas óseas y quemaduras en el pecho y la espalda, entre otras partes del cuerpo.
El hombre, según su propia confesión, abofeteó a la anciana en la cabeza dos veces, le dio un puñetazo en el rostro, la tiró del pelo y le rompió el brazo.
Cuando la mujer perdió la conciencia, le echó agua caliente, “pensando que se despertaría”.
El cuidador declaró a la policía: “Me llamaron ‘estúpido’ y perdí los estribos”.
Después de cometer el crimen, Kikuchi retiró aproximadamente 900.000 yenes (6.200 dólares) en efectivo en varios lugares, y comenzó a viajar en taxis y trenes para huir de la policía.
Sin embargo, fue captado por cámaras de vigilancia en Sapporo, adonde la policía envió agentes para capturarlo.
El domingo, una persona llamó a la policía para alertar de la presencia de una persona sospechosa en las escaleras de emergencia en un edificio de apartamentos.
La policía llegó al lugar y detuvo al hombre, a quien identificó más tarde como el criminal.
El helper dijo a la policía: “Quería suicidarme en Hokkaido”. (International Press)