Un comité asesor del gobierno japonés buscará recomendar una designación diferente para el COVID-19, tanto como tratarlo como la gripe, una acción que tiene como objetivo aliviar las interrupciones en el sistema médico del país.
La ley japonesa divide las enfermedades infecciosas en cinco categorías, según el grado de peligro y otros factores, pero el COVID-19 se encuentra fuera de esa escala con requisitos que exigen un informe más estricto sobre la cantidad de casos, financiamiento público para el tratamiento y otras medidas.
El nivel más alto de esta escala incluye en la categoría 1, por ejemplo, al virus del Ébola y la peste bubónica.
Los asesores quieren colocar el COVID-19 en la categoría 5, el mismo nivel que la influenza estacional, algo que la eximiría de la presentación de un informe completo de casos. Además, la financiación pública del tratamiento ya no estaría disponible, por lo que aumentaría la carga financiera para los pacientes.
Las primeras recomendaciones se hicieron el 14 de julio. Aquél día el panel sobre medidas de COVID-19 sugirió la necesidad de «comenzar a considerar designar al COVID-19 como una de muchas enfermedades».
La discusión para re denominar la categoría de infección del COVID en Japón podría retomarse cuando baje la cantidad de infecciones de la séptima ola. (RI/)
