Entre julio de 2020 y mayo de 2022, hubo 3.315 casos de fraude contra el Estado japonés por ayuda pública obtenida irregularmente.
El monto total que los beneficiarios recibieron de manera ilícita ascendió a un total de 3.290 millones de yenes (24,4 millones de dólares), según cifras de la Agencia Nacional de Policía publicadas por Mainichi Shimbun.
El número de involucrados fue de 3.770. De ellos, alrededor del 80 % eran jóvenes (39 años o menos).
El grupo etario con más arrestados o denunciados fue el de las personas de 20 a 29 años (el 62 %).
Los estafadores de 70 a 89 años representaron al 1 %.
La ayuda estaba dirigida a empresas afectadas por la pandemia de coronavirus.
Entre los líderes de las bandas de estafadores hubo servidores públicos (un empleado municipal, un trabajador de la oficina de impuestos, etc.), así como un yakuza y un estudiante universitario. (International Press)
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