Bajo los acontecimientos de la invasión rusa a Ucrania, el gobernante Partido Liberal Democrático (PLD) de Japón elaborará una propuesta este mes para pedir un aumento en el gasto de defensa en previsión de una emergencia en Taiwán, reveló el Nikkei.
El PLD quiere alentar al gobierno a introducir equipos que mejoren la disuasión y tratar de reflejar el nuevo potencial militar en la estrategia de seguridad nacional que se revisará a finales de año. Japón considera como una amenaza directa cualquier acción militar de China en Taiwán.
La Estrategia de Seguridad Nacional, que es la guía de la política diplomática y de defensa del país, tendrá su primera revisión desde que fue formulada en 2013.
El esquema del plan de defensa, que tiene como objetivo el desarrollo de capacidad de defensa a corto y mediano plazo, ya tiene una proyección del gasto en defensa durante cinco años, pero este presupuesto será revisado para incluir medidas de seguridad que han cambiado drásticamente debido a la invasión de Ucrania.
Mientras Estados Unidos se ha visto obligado a aumentar su enfoque en Europa para tratar con la amenaza de Rusia, existe la posibilidad de que Japón se vea obligado a fortalecer sus capacidades de defensa para enfrentar a China y Corea del Norte en Asia.
El Partido Liberal Democrático quiere despertar el debate público sobre cómo responder a posibles emergencias militares en torno a Japón a raíz de la invasión de Ucrania.
Uno de los pilares de la propuesta del PLD es el aumento del gasto en defensa siguiendo el paso de EEUU y Alemania que incrementarán su presupuesto en defensa al 4% y 2% del PIB respectivamente para el año fiscal 2023. El PLD ya tiene un compromiso electoral para elevar el gasto en defensa japonés al 2% o más» gradualmente.
Los gastos relacionados con la defensa en el presupuesto del año fiscal 2022 de Japón son menos del 1% del PIB. El total del presupuesto inicial más el presupuesto complementario para el año fiscal 2021 llegó al 1,24%.
Se espera que Japón utilice más dinero en armas que permitan un contraataque contra territorio enemigo, además del fortalecimiento en guerra cibernética y una expansión del entrenamiento conjunto con el ejército estadounidense.
Las recomendaciones del PLD mencionan cómo hacer que la otra parte piense que «si atacas, obtendrás represalias» y lo disuada de atacar Japón. El primer ministro Fumio Kishida ha declarado varias veces que considerará poseer «capacidad para atacar bases enemigas» con el lanzamiento de misiles.
La actual estrategia de seguridad nacional había posicionado a Rusia como un socio cooperante en materia de seguridad y energía, pero ahora no será posible mantener las relaciones tradicionales con Moscú y ello exige cambios en el texto del plan. (NI/RI/)