El popular patinador japonés Yuzuru Hanyu no solo tiene fans en Japón.
En China también tiene devotos, como Yu Qian, una mujer que ha viajado cuatro veces fuera de su país para verlo en competencia.
Los Juegos Olímpicos de Pekín han sido una nueva oportunidad para que Yu siga a su ídolo.
Yu mantiene comunicación con una fan japonesa de Hanyu. “Nos dio la oportunidad de conocernos”, dice a la NHK.
La mujer destaca la importancia del deportista como puente entre Japón y China, países históricamente divididos por la guerra.
Yu espera que los viajes entre Japón y China se normalicen “para que los intercambios se puedan realizar con más frecuencia y la relación entre las personas de los dos países pueda mejorar”.
El jueves pasado, términos relacionados con Hanyu en la plataforma china Weibo fueron tendencia.
El escenario donde Hanyu compitió congregó a una gran cantidad de fans que exhibieron pancartas alusivas a él.
El japonés, de 27 años, fue cuarto en patinaje artístico en los Juegos de Pekín y no pudo ganar su tercera medalla de oro olímpica consecutiva. (International Press)
